Inicio / Quiénes somos / De mano en mano / Contacto
Documentos / Reportes / Colaboradores / Guías y formatos / Legislación / Sitios de interés
Documentos / Reportes / Colaboradores / Guías y formatos / Legislación / Sitios de interés
Sorpresas electorales
Por EDUARDO MARTÍNEZ BENAVENTE
Julio 22, 2012
Si los potosinos que votaron el 1 de julio por los diputados locales del Partido Acción Nacional en los distritos VI y VIII con sede en esta capital y en el X de Rioverde hubieran conocido antes los términos y condiciones del ilegal y leonino convenio de coalición que suscribieron los dirigentes de este partido con los del PANAL, seguramente que muchos electores no hubieran sufragado por estos candidatos. Se trata de una maniobra fraudulenta en la que participó también el Consejo Estatal Electoral que preside José Martín Vázquez Vázquez y manipula el secretario de actas, Rafael Rentaría Armendáriz, pues el resto de los consejeros ni entienden ni les interesan estos asuntos. Hubo dolo y mala fe por parte de estos funcionarios porque no publicaron en el Periódico Oficial del Estado y en uno de los diarios de mayor circulación, como estaban obligados, el convenio que firmaron las partes, y sólo dieron a conocer el acuerdo que tomó ese organismo, pero omitiendo en esta información las turbias negociaciones de la repartición de votos.
El Consejo Estatal Electoral ocultó a la ciudadanía los arreglos a los que llegaron los representantes de estos partidos para que los votos que obtuviera la coalición que denominaron “Acción Ganadora” se distribuyeran de la siguiente manera: el 99% para el Partido Nueva Alianza y el 1% para el Partido Acción Nacional. Esta sola operación le permitió al partido de la maestra Elba Esther Gordillo sumarle 85,207 votos a sus candidatos a diputados plurinominales que de otra manera nunca hubieran obtenido. Para darnos una idea del peso y dimensiones reales que representa el PANAL en la capital del estado, basta con señalar que Alejandro Zapata Perogordo, quien también se coaligó con el PANAL para la presidencia municipal, sacó a través de este partido la insignificancia de 6,628 sufragios de los 127,451 que le reconocieron las autoridades electorales. El presidente estatal del PAN, Marco Antonio Gama Basarte, es el principal responsable de esta farsa y debe ser destituido de su cargo porque tenía la obligación de advertirle a los ciudadanos que al votar por los candidatos de Acción Nacional también lo estaban haciendo para que el desarraigado nieto del ex gobernador Carlos Jonguitud, Jaen Castilla Jonguitud y el cacique de la Sección 26 del SNTE, Crisógono Sánchez Lara, alcanzaran una curul en la próxima Legislatura.
El PANAL obtuvo una votación efectiva del 3.01%, la mínima que se requiere para alcanzar un asiento en el Congreso del Estado, y eso porque alguien les ayudó para completar esa cifra, pues en la página web del CEEPAC, cuando ya se habían computado todos los votos, apareció que le faltaban dos centésimas para acreditar ese porcentaje. Sin embargo el Consejo Estatal Electoral a través de la votación que logró con la coalición “Acción Ganadora”, le regaló una diputación más que ahora reclama la ex cónyuge del próximo presidente municipal de Soledad de Graciano Sánchez, la perredista Dora Patricia Juárez Alejo, quien ante la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, con sede en Monterrey, intenta a través de un Juicio para la Protección de los Derechos Político Electorales del Ciudadano, que se corrija esta situación, que de prosperar se ordenaría que la sienten en la curul que ilegalmente pretende ocupar Crisógono Sánchez, pues el procedimiento de asignación de diputados plurinominales se realizó contrario a derecho.
En esta situación estaría también la segunda diputación que le regalaron al Verde que de corregirse le correspondería a la priista Martha Rangel Torres, esposa del secretario de Desarrollo Social del gobierno del Estado, Fernando Chávez Méndez. La también ex directora de Infraestructura Urbana del Municipio de Soledad y ex síndico de la administración de Octavio Pedroza, la ex panista Juárez Alejo, demanda la nulidad del procedimiento utilizado por el Consejo Estatal Electoral en la asignación de diputados plurinominales porque sólo le correspondía un diputado al PANAL y otro al VERDE, y les dieron dos a cada uno ellos, con lo que nace viciada de origen la representación legislativa de los potosinos por la sobrerrepresentación que tendrían estas minorías. La votación efectiva de estos dos partidos fue considerablemente menor a la que obtuvo el PRD, al que sólo se le reconoció un diputado de representación proporcional. Con este juego de cifras el VERDE sumó 5 diputados -3 de mayoría y 2 plurinominales- que representa el 18.51 de la membresía del Congreso, cuando sólo sacó una votación efectiva de 35,272 votos en el estado, que equivale al 3.19% de la votación total efectiva.
Otra sorpresa en esta elección podría ser que el TRIFE le ordenara al Consejo Estatal Electoral que reasignara las diputaciones plurinominales en base a la votación efectiva obtenida por cada uno de los partidos políticos que participaron, de tal manera que la curul que le correspondió al Partido del Trabajo se la entregaran al tercero de la lista del Partido Acción Nacional, Antonio Madrigal Ortiz, ex colaborador del gobernador Marcelo de los Santos; como se desprende del análisis que elaboró el maestro Álvaro Martínez Silva, ex funcionario del IFE, que con su amplia y reconocida experiencia en esta materia asegura que al PANAL sólo le correspondía una plurinominal y que el PT, que no obtuvo ni el 3% de la votación efectiva, no tiene derecho a la que le adjudicaron porque es ilegal la forma en la que le traspasaron los votos computados a los candidatos del PRD.
A la diputada electa por el PRI-PANAL, Marianela Villanueva Ponce, también se le puede caer la curul por su torpeza o ignorancia, pues regresó a su chamba de directora del DIF municipal, como públicamente lo ha manifestado, sin haber recabado la licencia previa del Congreso, violando así el artículo 49 de la Constitución del Estado que prohíbe a los diputados, desde el día de su elección hasta aquel en que concluyan su encargo, desempeñar comisiones, cargos o empleos en la federación, estado y municipios, bajo la pena de perder su cargo. A su suplente Sonia Verónica Zavala Gamez le caería del cielo ese sillón; y pensar que hay quienes dicen que de suplente ni de Dios.
Julio 22, 2012
Si los potosinos que votaron el 1 de julio por los diputados locales del Partido Acción Nacional en los distritos VI y VIII con sede en esta capital y en el X de Rioverde hubieran conocido antes los términos y condiciones del ilegal y leonino convenio de coalición que suscribieron los dirigentes de este partido con los del PANAL, seguramente que muchos electores no hubieran sufragado por estos candidatos. Se trata de una maniobra fraudulenta en la que participó también el Consejo Estatal Electoral que preside José Martín Vázquez Vázquez y manipula el secretario de actas, Rafael Rentaría Armendáriz, pues el resto de los consejeros ni entienden ni les interesan estos asuntos. Hubo dolo y mala fe por parte de estos funcionarios porque no publicaron en el Periódico Oficial del Estado y en uno de los diarios de mayor circulación, como estaban obligados, el convenio que firmaron las partes, y sólo dieron a conocer el acuerdo que tomó ese organismo, pero omitiendo en esta información las turbias negociaciones de la repartición de votos.
El Consejo Estatal Electoral ocultó a la ciudadanía los arreglos a los que llegaron los representantes de estos partidos para que los votos que obtuviera la coalición que denominaron “Acción Ganadora” se distribuyeran de la siguiente manera: el 99% para el Partido Nueva Alianza y el 1% para el Partido Acción Nacional. Esta sola operación le permitió al partido de la maestra Elba Esther Gordillo sumarle 85,207 votos a sus candidatos a diputados plurinominales que de otra manera nunca hubieran obtenido. Para darnos una idea del peso y dimensiones reales que representa el PANAL en la capital del estado, basta con señalar que Alejandro Zapata Perogordo, quien también se coaligó con el PANAL para la presidencia municipal, sacó a través de este partido la insignificancia de 6,628 sufragios de los 127,451 que le reconocieron las autoridades electorales. El presidente estatal del PAN, Marco Antonio Gama Basarte, es el principal responsable de esta farsa y debe ser destituido de su cargo porque tenía la obligación de advertirle a los ciudadanos que al votar por los candidatos de Acción Nacional también lo estaban haciendo para que el desarraigado nieto del ex gobernador Carlos Jonguitud, Jaen Castilla Jonguitud y el cacique de la Sección 26 del SNTE, Crisógono Sánchez Lara, alcanzaran una curul en la próxima Legislatura.
El PANAL obtuvo una votación efectiva del 3.01%, la mínima que se requiere para alcanzar un asiento en el Congreso del Estado, y eso porque alguien les ayudó para completar esa cifra, pues en la página web del CEEPAC, cuando ya se habían computado todos los votos, apareció que le faltaban dos centésimas para acreditar ese porcentaje. Sin embargo el Consejo Estatal Electoral a través de la votación que logró con la coalición “Acción Ganadora”, le regaló una diputación más que ahora reclama la ex cónyuge del próximo presidente municipal de Soledad de Graciano Sánchez, la perredista Dora Patricia Juárez Alejo, quien ante la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, con sede en Monterrey, intenta a través de un Juicio para la Protección de los Derechos Político Electorales del Ciudadano, que se corrija esta situación, que de prosperar se ordenaría que la sienten en la curul que ilegalmente pretende ocupar Crisógono Sánchez, pues el procedimiento de asignación de diputados plurinominales se realizó contrario a derecho.
En esta situación estaría también la segunda diputación que le regalaron al Verde que de corregirse le correspondería a la priista Martha Rangel Torres, esposa del secretario de Desarrollo Social del gobierno del Estado, Fernando Chávez Méndez. La también ex directora de Infraestructura Urbana del Municipio de Soledad y ex síndico de la administración de Octavio Pedroza, la ex panista Juárez Alejo, demanda la nulidad del procedimiento utilizado por el Consejo Estatal Electoral en la asignación de diputados plurinominales porque sólo le correspondía un diputado al PANAL y otro al VERDE, y les dieron dos a cada uno ellos, con lo que nace viciada de origen la representación legislativa de los potosinos por la sobrerrepresentación que tendrían estas minorías. La votación efectiva de estos dos partidos fue considerablemente menor a la que obtuvo el PRD, al que sólo se le reconoció un diputado de representación proporcional. Con este juego de cifras el VERDE sumó 5 diputados -3 de mayoría y 2 plurinominales- que representa el 18.51 de la membresía del Congreso, cuando sólo sacó una votación efectiva de 35,272 votos en el estado, que equivale al 3.19% de la votación total efectiva.
Otra sorpresa en esta elección podría ser que el TRIFE le ordenara al Consejo Estatal Electoral que reasignara las diputaciones plurinominales en base a la votación efectiva obtenida por cada uno de los partidos políticos que participaron, de tal manera que la curul que le correspondió al Partido del Trabajo se la entregaran al tercero de la lista del Partido Acción Nacional, Antonio Madrigal Ortiz, ex colaborador del gobernador Marcelo de los Santos; como se desprende del análisis que elaboró el maestro Álvaro Martínez Silva, ex funcionario del IFE, que con su amplia y reconocida experiencia en esta materia asegura que al PANAL sólo le correspondía una plurinominal y que el PT, que no obtuvo ni el 3% de la votación efectiva, no tiene derecho a la que le adjudicaron porque es ilegal la forma en la que le traspasaron los votos computados a los candidatos del PRD.
A la diputada electa por el PRI-PANAL, Marianela Villanueva Ponce, también se le puede caer la curul por su torpeza o ignorancia, pues regresó a su chamba de directora del DIF municipal, como públicamente lo ha manifestado, sin haber recabado la licencia previa del Congreso, violando así el artículo 49 de la Constitución del Estado que prohíbe a los diputados, desde el día de su elección hasta aquel en que concluyan su encargo, desempeñar comisiones, cargos o empleos en la federación, estado y municipios, bajo la pena de perder su cargo. A su suplente Sonia Verónica Zavala Gamez le caería del cielo ese sillón; y pensar que hay quienes dicen que de suplente ni de Dios.